Comentarios a la obra “Aprendizaje y Liderazgo docente
para el mejoramiento del sistema y la docencia en las salas de clase y
establecimientos escolares” (Carol Campbell et Al.).
Los aportes de Campbell
a la discusión sobre el rol del docente en los procesos de aprendizaje son
fundamentales para señalar el impacto que este tiene, con su liderazgo, dentro
de las comunidades educativas.
En este sentido, la
definición de “liderazgo docente” permite iniciar una reflexión en torno a su
figura, esta señala
“El liderazgo
docente se ha considerado como una forma de liderazgo compartido junto con
responsabilidades organizacionales que son delegadas por el rector (Leithwood
et al., 2007), como una forma de liderazgo pedagógico (Robinson, 2010) que
centra su atención en ser un profesor o líder experto que apoya a otros
profesores para que logren ser eficaces en sus prácticas, así como tener el
potencial para un liderazgo que propicie reformas en las escuelas y ofrezca un
enfoque que permita a los profesores encargarse de su propio aprendizaje, el
aprendizaje de sus estudiantes y de otros profesores y colegas (Harris, 2005)”.
Ciertamente, las
consideraciones sobre el tema recogidas por el autor para elaborar y proponer
dicha reflexión, coinciden en el valor e impacto del liderazgo dentro de una
comunidad de aprendizaje; sostiene que la eficacia de las prácticas y el
trabajo colaborativo dependen, en gran medida, de esta figura.
Desde el análisis y
reflexión de estos planteamientos, sostenemos que la definición de “liderazgo
docente” puede complementarse de la siguiente manera
El liderazgo
docente consiste en una exploración hacia nuevas formas de aprender y
relacionarse en comunidad; se comprende como un agente de movilización al
interior de la organización, que basa su quehacer en el permanente
cuestionamiento de las propias prácticas, la autoevaluación de sus convicciones
y en la apertura a nuevas estrategias que potencien su rol.
A su vez, el autor
afirma que “…no todas las prácticas docentes son igualmente eficaces y que no
todas las tentativas para desarrollar el aprendizaje profesional docente son
efectivas; no obstante, la evidencia muestra la relevancia que tiene la calidad
docente y el desarrollo del aprendizaje profesional, el liderazgo y la práctica
docente”.
En este estudio se
identificaron cinco beneficios principales del TLLP (‘Programa de Aprendizaje y
Liderazgo Docente’) que respaldan el liderazgo docente:
• Desarrollo del liderazgo docente
fundado en la experiencia auténtica;
La experiencia
auténtica considerada como valiosa en sí misma, se sitúa como soporte de la
práctica de liderazgo ejercida por los profesores exitosos. En esta medida, se
ofrece una base significativa para el intercambio de estrategias, metodologías,
etc.
• Una oportunidad para que los
profesores líderes contribuyan a mejorar el sistema y los establecimientos
escolares;
La oportunidad de
incidir constructivamente en los establecimientos, resulta fundamental;
reconociendo que esta posibilidad implica la disposición de diversos recursos,
la gestión de dichos recursos debe tender hacia la facilitación y flexibilidad de los procesos. La primera tarea
de la gestión, puede ser la detección de los liderazgos dentro de su comunidad;
en segundo lugar, propiciar el intercambio de experiencias entre los docentes;
finalmente, abrirse a la innovación que implica discutir aspectos de carácter
técnico – pedagógico.
• Reconocimiento como un profesor
líder por sus pares;
En la medida que la
comunidad reconozca y valore las actividades que realiza el docente líder, sus
aportes tendrán un mayor impacto en la comunidad. Este reconocimiento surge,
probablemente, como consecuencia natural de sus intervenciones y de las
instancias donde se expresen sus cualidades, considerando que la madurez de la
organización debe facilitar esas intervenciones e instancias.
• Desarrollo de habilidades, experiencias
y roles de liderazgo;
Si bien las
cualidades de liderazgo emergen a partir de las propias características personales
y los progresos técnico – profesionales, estas deben ser propiciadas y
fortalecidas por la comunidad donde participan estos docentes. En la medida que
la comunidad asuma este compromiso, las habilidades, experiencias y roles
podrán ser comunicados, compartidos y puestos en discusión, para el beneficio
de la comunidad y sus participantes.
• Apoyo y respeto del profesor líder
por parte del gobierno y los sindicatos de profesores;
Ciertamente, en
este aspecto se llega a una discusión trascendental que debe producirse a nivel
de gobiernos, en donde estos, como política de estado, establezcan formalmente
la posibilidad de instalar prácticas de colaboración propias de comunidades
maduras, dentro de políticas educacionales.
Así como, desde la
profundización de la práctica del docente líder, surgen evidentes beneficios
tanto para el equipo docente que participa en esta práctica, como para la
comunidad educativa donde se desarrolla dicha práctica; emergen a su vez,
desafíos que eventualmente pueden transformarse en obstáculos.
Los desafíos que
enfrentaron los profesores líderes TLLP según lo declarado en el texto de
Campbell, se identifican:
1. Tiempo y carga
de trabajo
2. La gestión de
las dinámicas del equipo del proyecto TLLP
3. Adquirir un
mayor compromiso y sobrellevar la resistencia de otras personas que pudieran
participar en el proyecto
4. Desafíos
prácticos, tecnológicos, financieros y logísticos de la implementación del
proyecto
Para cada uno de
estos desafíos, proponemos las siguientes acciones
1. Facilitar instancias y flexibilizar los procesos que deben cumplir los
docentes involucrados. Comprendiendo que los grados de participación es
fluctuante dentro del equipo docente, la facilitación y flexibilidad señalada,
debe producirse en aquellos que protagonicen estas actividades.
2. El equipo de gestión debe comprender que, según la madurez de la
organización, el desarrollo de estas actividades deben proponerse como
prácticas institucionales que obedecen a los lineamientos expresados,
eventualmente, en su Proyecto Educativo. De este modo, deben organizarse y
acompañarse como tal.
3. Evidentemente, asumir el liderazgo conlleva una responsabilidad; esta
podría convertirse en una “carga” difícil de sostener por un mismo miembro del
equipo docente. Para morigerar esta situación, proponemos que, desde el diseño
de esta actividad, se disponga claramente que la responsabilidad de los
procesos y sus resultados, es compartida, con la especificación de que,
finalmente, es la gestión directiva quien ha diseñado la actividad y, por
tanto, es el principal responsable.
4. Tal como fue señalado anteriormente, la gestión directiva debe asumir
la responsabilidad de disponer de los recursos tecnológicos y financieros para
implementar proyectos como este. Por otra parte, el desafío práctico se asume
desde la planificación y diseño de las instancias de comunicación (discusiones,
retroalimentaciones, etc.); mientras que el desafío logístico, puede ser
abordado desde la coordinación clara y transparente que la gestión directiva
dispone.
Como conclusión,
podemos afirmar que iniciativas como las que se proponen desde esta concepción
del trabajo docente, con los desafíos que desde allí se desprenden, así como
los beneficios que se generan con la misma, deben asumirse como un proceso
institucional posible, gracias a la madurez de la organización.
En la medida que
este proyecto sea asumido orgánicamente por los diversas dimensiones de la
organización, el impacto positivo se proyecta con mayores niveles de compromiso
e involucramiento del equipo docente.
Finalmente, citar
una afirmación relativa a este aspecto y abrir a la discusión tanto la teoría
como las propuestas que, a partir de ella, se presentan en este comentario
“Para construir
escuelas eficaces y mejorar los sistemas educativos se requiere desarrollar las
prácticas docentes y la formación de los mismos profesores. En este estudio se
destaca el aprendizaje profesional docente y el liderazgo docente en el
aprendizaje de otros profesores con el fin de mejorar las clases, la escuela y
el sistema escolar”.
Estimados compañeros en cuanto al concepto o definición que construimos sobre liderazgo Docente debemos tener en cuenta que éste implica un desarrollo profesional constante, consciente y organizado. El líder debe guiar, ser guiado, participar de este proceso de forma colaborativa propiciando el aprendizaje y reestructuración de todos, de manera que los mismos adquieran habilidades, conocimientos, destrezas, etc de forma eficaz y eficiente. El líder pedagógico es capaz de ejercer una influencia positiva en el grupo de trabajo, respeta para ser respetado y genera redes donde todos seamos uno.
ResponderBorrarEste es nuestro aporte para construir juntos un nuevo concepto de LIDERAZGO DOCENTE
Felicitaciones por su Blogger COMPAÑERITOS XD